La oficina de la mujer de Castro Municipio busca llevar a todas las mujeres de la comuna espacios de aprendizaje y contención.
Como parte del trabajo de acompañamiento y apoyo que realiza Castro Municipio a los vecinos y vecinas de la comuna, la oficina municipal de la mujer organizó y entregó un taller de agujado en fieltro, acompañado de una jornada de autocuidado para las vecinas de la isla Chelín, con el objetivo de entregar elementos básicos de la técnica, en un espacio de esparcimiento y encuentro después de un largo período de confinamiento.
Así lo informó la coordinadora de la oficina de la mujer de Castro Municipio, Claudia Bórquez, quien explicó que en la administración del alcalde Juan Eduardo Vera, el trabajo de atención en terreno que realiza Castro Municipio a los vecinos y vecinas de la comuna siempre ha sido fundamental, pero durante estos últimos 2 meses, en que se ha vuelto a las actividades presenciales, esta labor se ha intensificado.
Según lo explica Claudia Bórquez, con el paso a fase 4 de la comuna de Castro, el jefe comunal, instruyó reanudar las actividades presenciales, a través de espacios que permitan mejorar y consolidar el apoyo y acompañamiento que se le entrega a la comunidad, instancias que también están cumpliendo el objetivo de contención para muchas mujeres de la comuna.
En este sentido, las vecinas de Chelín que participaron esta capacitación, ya habían manifestado la necesidad de contar con iniciativas para distraerse de sus quehaceres diarios y sobre todo, para aprender una nueva técnica en artesanía y compartir con sus vecinas.
Así lo expresó la dirigente social del lugar, Flor Alvarado, quien, en conjunto con la oficina municipal de la mujer, coordinaron la actividad y la llevaron a cabo en la sede de la junta de vecinos de Huechochelin.
Por su parte, y en el marco de la técnica aprendida, Alejandra Ovalle, profesora del taller, explicó que el objetivo del curso es que sus participantes, conozcan y dominen la técnica básica del fieltro agujado, cuyo proceso se basa en compactar el vellón con una aguja especial para entrelazar las fibras a través de las puntadas, creando proyectos como pintura en fieltro.
La profesora indicó haber disfrutado la actividad con las mujeres de Chelín que demostraron tener un don innato en este arte y las invitó a continuar desarrollando la actividad que a través de las distintas tonalidades del vellón, pueda entregar color a sus vidas y la de sus familias.
Por último, Claudia Bórquez, expresó su deseo de volver pronto con nuevos cursos y talleres para las mujeres de las islas, que por circunstancias geográficas están más alejadas de este tipo de acciones.
“Ahora que estamos retomando las actividades presenciales, podremos venir como antes de la pandemia, con iniciativas como conversatorios, encuentros y talleres para nuestras vecinas de Chelín y Quehui”, agregó la funcionaria municipal.
Departamento de Comunicaciones y RR.PP.
Castro, 24 de septiembre